Comparsas familiares con ganas de fiesta desfilan en Los Alcázares y en San Pedro del Pinatar
11.02.13 - 00:46 -
Con el tantán y los silbatos de la samba como fondo, desfilaron ayer las comparsas de San Pedro del Pinatar y Los Alcázares. Más numerosas que nunca en participación, más imaginativas y coordinadas. Menos plumas -hubo años de excesos-, que cedieron terreno al disfraz divertido y desmesurado. Más ganas de evasión, tal vez el carnaval era esto. Por las calles de Los Alcázares, ya con el viento gastando bromas a los enmascarados, avanzaba la nutrida tripulación de corsarios del colegio Al Kazar, junto a grupos de muñecas con sombrillas, y personajes de cuento del colegio Bienvenido Conejero. Hippies del Petra Sánchez y grupos de fantasía teatral en blanco y negro.
Por San Pedro del Pinatar abundaron las familias marinas, los grupos frutales y los vikingos de La Llana. Con ninfas plateadas y una voluminosa musa se echó a la calle la peña Antares, junto a las fresas y los plátanos de 'Sin poco salimos'.
Llamó la atención la masiva participación de la comparsa 'Kebanna', con decenas de mariantonietas de peluca empolvada y abanicos de encaje, de todos los tamaños, dirigidas por la profesora de baile Laura Martínez, cuyo embarazo no le impidió dirigir la comitiva afrancesada con ritmo brasileño.
La Asociación de Padres del colegio Villa Alegría desfiló con la réplica del Submarino Peral en cabeza de los numerosos marineros. «Como en Cartagena no saben dónde lo van a colocar, nos lo hemos traído a San Pedro del Pinatar», se explicaba en la peana del monumento. Numeroso público salió a la calle a ver los primeros desfiles del Mar Menor, que concluyen el próximo domingo con la cita de La Ribera, que reúne este año a 50 comparsas.
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